Estambul es el paraíso de las compras, alfombras,
cerámica, objetos de cobre y de aluminio, especies y frutos secos.
Es
necesario descalzarse para entrar en cada mezquita, llevar faldas o pantalones
largos y camisas o camisetas con mangas, de lo contrario te obligarán a ponerte antes de entrar en las
mezquitas y lugares sagrados del Islam una especie de faldas o capas.
La
cocina turca es una de las mejores del mundo: variada y deliciosa, la carne, los pescados y las verduras tienen
recetas riquísimas. No dejes de saborear
un auténtico Doner Kebab, tiras de cordero asado, ni sus aperitivos.
No
hay que perderse por la noche el barrio de Beyoglu, en la zona occidental. Las
calles más concurridas son la del francés
y la de Asmali Mescit, la marcha dura hasta la madrugada.
Y
por qué toda esta explicación, pues claro que sí, porque unos buenos amigos han
estado este verano recorriendo sus
callejuelas, comiendo los ricos dulces y lo que más les impresionó son las llamadas a la oración, rezan cinco veces
al día.
Muchas
gracias chavalotes por traerme este espectacular dedal, me encanta!
Besotes
y hasta la semana que viene!